20 de diciembre de 2016

Galletas de almendra navideñas


Aquí estoy de nuevo con una receta de galletas que están para morirse de ricas, y como es tiempo de regalar, que mejor regalo que unas galletas de almendra tan ricas y tan bonitas como estas.......a que si........nos las enseñaba no hace mucho Cristina de Kanela y limón, y decía que teníamos que probarlas, que eran una delicia, pues dicho y hecho, Cristina tienes toda la razón, buenas no, lo siguiente, y lo mejor es que son muy, muy fáciles de preparar, sin robot, sin batidora, mezclar y juntar todos los ingredientes con las manos y voalá......os cuento como lo hice.



                                   INGREDIENTES: (22 galletas)

                     180 gr de almendra molida
                     180 gr de harina de trigo de repostería
                     150 gr de azúcar glass tamizada
                     150 gr de aceite de oliva suave
                     1 cucharadita de levadura química
                     1 cucharadita de bicarbonato
                     1 cucharadita de canela molida
                     ralladura de 1 limón
                     pizca de sal
                     
                         Para decorar: almendras enteras, guindas y 1 huevo batido. 


                          PREPARACIÓN:

Precalentar el horno a 180º

Forramos una bandeja de horno con papel, reservamos.

En un bol mezclamos bien todos los ingredientes, menos el aceite. Mezclamos con la ayuda de una varilla o un tenedor.

Añadimos el aceite y amasamos con las manos hasta que obtengamos una masa ligada, unida.

Vamos cogiendo porciones de entre 8-10 gr formamos bolitas y las vamos depositando en la bandeja forrada con papel, unidas de tres en tres.

Una vez hayamos acabado de formar todas las galletas las pintamos con el huevo batido.

Colocamos en el centro de cada bolita una almendra entera con la punta hacia el centro( fijaros que queden todas en el mismo sentido para que queden más bonitas) y a la vez aplastamos la almendra hasta encajar en la masa, por último ponemos un trozo de guinda en el centro.

Horneamos entre 15-20 minutos, depende de cada horno, tener mucho cuidado de que no se doren demasiado.

Retiramos del horno y las pasamos con la ayuda de una espátula a una rejilla hasta que se enfríen completamente (cuidado al pasar las galletas a la rejilla por que estarán blandas)

No conviene dorarlas demasiado para que no endurezcan demasiado.

                                                                                     Mary

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