Si sois chocolateros esta tarta os va a encantar, la famosa tarta Sacher o Sachertorte como se la conoce también, tarta de chocolate por excelencia, y sin duda, una de las más conocidas y apreciadas del mundo. Esta versión que os presento es muy fácil, y el resultado es fantástico. Yo la descubrí en una revista de cocina hace unos cuantos años y cuando la hice por primera vez la verdad que nos sorprendió mucho, es la preferida de mis hijos. Que os parece si vemos su elaboración?.
INGREDIENTES: (molde de 24 cm)
250 gr de chocolate para fundir de buena calidad
6 huevos a temperatura ambiente
260 gr de azúcar
20 gr de miel
180 gr de harina
180 gr de mantequilla a temperatura ambiente
pizca de sal
mermelada de albaricoque
COBERTURA:
250 ml de nata
300 gr de chocolate para fundir de buena calidad
50 gr de miel
ELABORACIÓN:
Lo primero que haremos será fundir el chocolate al baño María, o en el micro, a intervalos de 30 segundos removiendo de cada vez, una vez lo tengamos fundido dejamos tibiar, hasta que alcance los 32º centigrados, medimos con un termómetro de cocina, si no tenéis dejar templar unos minutos.
Cubrimos la base del molde desmontable con papel de horno, engrasamos y enharinamos, retiramos el excedente de harina y reservamos.
Precalentamos el horno a 180º
Tamizamos la harina, reservamos.
Separamos las claras de las yemas en dos boles.
Batimos la mantequilla con 110 gr de azúcar y la miel, batimos a velocidad media, hasta conseguir que se quede todo bien integrado y la mezcla se vea espumosa, incorporamos el chocolate, seguimos batiendo a velocidad baja y añadimos las yemas una a una, reservamos.
Batimos las claras con la pizca de sal, cuando empiecen a montar vamos añadiendo el azúcar restante poco a poco, deberá quedar brillante y montado pero cremoso a la vez, no nos interesa un merengue firme si no que nos quede cremoso.
Incorporamos las claras montadas a la mezcla del chocolate y mezclamos suavemente con una varilla, con movimientos envolventes de abajo a arriba.
Añadimos la harina tamizada en dos veces, siempre delicadamente y con movimientos envolventes.
Volcamos sobre el molde engrasado y metemos al horno, 50-60 minutos, hacemos la prueba del palillo.
Una vez horneado, dejamos enfriar totalmente sobre una rejilla.
Tamizamos la mermelada para que nos quede más fino al paladar.
Dividimos el bizcocho en dos y rellenamos con la mermelada, pintamos también por fuera y dejamos secar un rato.
Mientras preparamos la cobertura, troceamos el chocolate en trozos pequeños reservamos en un bol. ponemos a calentar la nata y la miel, removemos bien, y cuando comience a hervir volcamos sobre el chocolate, removemos hasta que se haya fundido completamente, reservamos hasta que veamos que tiene la consistencia adecuada para cubrir, con el termómetro unos 32º no debe de estar muy liquido.
Ponemos el bizcocho sobre una rejilla y debajo de esta un plato, para recoger el chocolate que nos caiga de cubrir, vamos regando con el chocolate y dejando que nos caiga por los lados, se puede alisar con una espátula si se quiere.
Las letras las hice con una manga pastelera con boquilla del numero 3.
Mary
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